domingo, 2 de septiembre de 2007

Ocaso

No eres alguien que merezca mi pena. No eres quien yo creía. No me has defraudado tú, sino mi forma equivocada de elevarte a las alturas. Ya no te admiro. Tampoco te quiero, porque me es difícil amar a quien no es capaz de mantenerme vivo el intelecto. No eres mas que un infeliz palurdo que se creyó el ombligo del mundo cuando notó que alguien de mi categoría posaba los ojos en tu minúscula persona. No has sabido mantenerte en la cima, pobre idiota. El vértigo de tu insolencia y las trampas infantiles, te han despeñado montaña abajo, y ahora estas en la base, cubierto por el barro que se te fue pegando mientras caías.

No hay comentarios:

ADVERTENCIA LEGAL

Todos los contenidos que aparecen, o puedan aparecer expuestos en este blog, pertenecen a Dña. Celsa Muñiz Diez y están registrados. Por ello están protegidos por el Real Decreto Legislativo 1/1996 de 12 de abril (Ley de Propiedad Intelectual).

No se permite la reproducción, total o parcial, en ningún soporte y para ningún fin, de ninguno de dichos contenidos salvo autorización expresa de la autora. En caso de autorización se citará siempre la autoría y la fuente original, creando, si fuese posible, un vínculo a esta página.